Quince minutos -Capítulo I- ¿Dónde están tus quince minutos?

¿Quince minutos de qué?, ¿qué está diciendo el tipo este? ¿Tendré que explicártelo? Vale, allá voy. El gran Andy, como si no lo supieras, proclamó que algún día en el futuro –o sea ahora–, todos seríamos famosos al menos durante quince minutos. Lo has oído decir ¿no? Deja de arrugar la nariz y ahora suponte por un momento que esto sea verdad. ¿Ya lo has echo?, entonces: ¿no se te ocurre preguntarte dónde andarán los tuyos? Sí, tus –al menos– quince minutos? ¿No? ¿Dices que tú nunca, ni por un segundo, has deseado ser famoso, admirado, una estrella?; ¿nunca? Seguro, tú eres feliz ahí en Villa Chica dejando pasar los días. No puedo criticarlo, igual es lo mejor que se puede hacer. Yo sí que lo he deseado, a veces con más y otras con menos intensidad y hasta se podría decir que lo conseguí: he sido famoso –también más o menos– en diferentes momentos de mi vida. Lo que me preocupa es que a veces siento que no valió la pena, porque para conseguirlo, parece que tuve que traicion...